Muelas del juicio: guía para entender qué son, cuándo aparecen y por qué extraerlas
Muelas del juicio: guía para entender qué son, cuándo aparecen y por qué extraerlas
Todos tenemos muelas del juicio o también conocidas como cordales. En algunos casos, estas muelas no llegan a desarrollarse. Además, en la mayoría de las personas les ocasiona mucho dolor, pero no todos somos iguales. De hecho, hay quienes no lo experimentan.
En algún momento hemos escuchado hablar de estas muelas pero no sabemos realmente qué son, cuándo aparecen y por qué debemos extraerlas. Es importante que tengamos conocimiento de este tema porque en ocasiones suelen afectar al resto de los dientes.
Qué son las muelas del juicio
Las muelas del juicio son las cuatro piezas que salen en la parte posterior de la boca y las últimas en salir. Generalmente, estas se quedan debajo de la encía y comienzan a crecer en un ángulo irregular provocando grandes complicaciones.
Una de esas complicaciones es que afectan la posición de los demás dientes deformándolos o empujándolos hacia adelante. Debido a esto, perjudican gravemente la mordida y pueden ocasionar algunas infecciones que son muy comunes.
Cuándo aparecen las muelas del juicio
Las cordales suelen aparecer entre los 17 a 25 años de edad y en casos extremos no salen. También, existe la posibilidad de que salgan a una temprana o tardía edad y puede que no surjan las cuatro.
Además, se les da el nombre de muelas de juicio porque salen a la edad en que las personas maduran mentalmente y ya su esqueleto está formado completamente.
En algunas personas salen las muelas de juicio impactadas, es decir, que no tienen espacio para desarrollarse de forma normal y para salir. Si la persona adulta ya ha alcanzado la dentición definitiva con las cuatro cordales tendrá 32 dientes en total, de no ser así, solo tendrá en su mandíbula 28 dientes en total.
Por qué extraer las muelas del juicio
Desde la clínica dental Doctores Blanco en Oviedo recomiendan extraer las muelas de juicio cuando no brotan de la forma natural y presentan los siguientes síntomas:
- Dolor.
- Tumores.
- Caries extensa.
- Infección.
- Daño en los dientes cercanos.
- Sacos llenos de quistes.
- Enfermedad en las encías.
Cuando se presentan estos síntomas es porque las cordales no tienen el espacio que necesitan para que crezcan como debe ser. Esto quiere decir que están creciendo en un ángulo inhabitual o de forma horizontal, ocasionando los siguientes problemas:
- Que permanezcan dentro de las encías, quedando atrapadas en la mandíbula produciendo una fuerte infección que provocan quistes, dañan el hueso de apoyo y las raíces de los otros dientes.
- Como están saliendo de una forma inusual su zona de limpieza se vuelve difícil, atrayendo a las bacterias que causan las infecciones orales y múltiples enfermedades en las encías.
- Empujan a los demás dientes dañándolos o deformándolos.
Sin embargo, nuestros odontólogos no recomiendan su extracción cuando las muelas presentan las siguientes características:
- Crecen normales y completamente.
- Están sanas.
- Se pueden limpiar fácilmente como el resto de los dientes.
- Tienen la posición perfecta y la mordida con la muela es opuesta.
No obstante, la decisión de extraer las muelas de juicio dependerá de nuestra opinión. En algunos casos, se recomienda consultar con nuestros dentistas especializados en muelas del juicio para que nos ayude a saber si debemos sacárnoslas o no.
En conclusión, cuando empecemos a sentir algunos de estos síntomas debemos acudir rápidamente a nuestro odontólogo en Oviedo para que nos diga qué hacer. Debemos tener presente que estos dolores pueden ser leves al principio, pero después se convierten en infecciones grandes o incluso en tumores.
Además, si empiezan a salir como no deben pueden afectar nuestra forma de morder, así que no lo dejemos pasar por alto.
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